Cualquier efecto secundario que tenga dependerá del tipo y la fuerza de su tratamiento con dosis altas. Su equipo del hospital le dirá qué esperar y cómo puede manejar los efectos secundarios.

Los posibles efectos secundarios incluyen el aumento de riesgo de infección, anemia y sangrado debido a los bajos recuentos sanguíneos. También puede tener náuseas, disminución del apetito y dolor en la boca. Un dietista y su enfermera le ayudarán a manejar estos síntomas. También puede notar otros efectos secundarios como la pérdida del cabello y el cansancio. Problemas menos comunes incluyen el fracaso del injerto.

Tendrá pruebas regulares para comprobar su salud en general y para supervisar los efectos secundarios. La mayoría de los efectos secundarios son peores cuando su recuento sanguíneo está en su punto más bajo. Como esto mejorando, sus efectos secundarios también lo harán.