Reflujo a largo plazo

El cáncer de esófago parece ser más común en personas que tienen reflujo a largo plazo. Esto se produce cuando el ácido del estómago refluye hacia el esófago. Puede ocurrir en personas con condiciones tales como la enfermedad de reflujo gastroesofágico (ERGE). El reflujo ácido puede dañar el esófago y puede llevar a una condición llamada Esófago de Barrett. Esto se produce cuando las células se desarrollan de manera anormal en el revestimiento del extremo inferior del esófago. Esta condición no es cáncer, pero un pequeño número de personas (menos del 1%) con esófago de Barrett pueden llegar a desarrollar cáncer. Se conoce como una condición pre-cancerosa.

Sexo

Cáncer de esófago es más común en hombres que en mujeres.

Edad

El riesgo de padecer cáncer de esófago aumenta con la edad. Es menos común en personas menores de 45 años.

Tabaco

Las probabilidades de desarrollar cáncer de esófago aumentan cuando una persona fuma, y más si es en grandes cantidades. Todos los tipos de tabaco son perjudiciales pero provoca más daños fumar cigarros que fumar pipa.

Obesidad

El exceso de peso puede aumentar el riesgo de desarrollar cáncer de esófago. Esto puede deberse a que el reflujo a largo plazo es más común en personas con sobrepeso.

Alcohol

Beber mucho alcohol durante un largo periodo de tiempo aumenta el riesgo. Las personas que beben alcohol y fuman también pueden tener mayor riesgo de desarrollar cáncer de esófago.

Dieta

Comer grandes cantidades de carnes rojas y procesadas (como salchichas y hamburguesas) puede aumentar el riesgo. Comer mucha fruta fresca y verduras puede ayudar a reducir el riesgo.

Algunas evidencias sugieren que el consumo de bebidas muy calientes puede aumentar el riesgo de desarrollar cáncer esofágico. Esto es debido a que las bebidas calientes pueden dañar el revestimiento esofágico.

Tratamiento de una cáncer previo

La radioterapia en el área del tórax pude aumentar el riesgo del cáncer esofágico, aunque esto es poco frecuente.

Otras condiciones médicas raras

Acalasia: se produce cuando el músculo que controla la apertura entre el esófago y el estómago no se relaja adecuadamente. Las personas con acalasia tienen un mayor riesgo de desarrollar cáncer de esófago.

Tilosis: se trata de una alteración hereditaria de la piel poco común. Las personas con tilosis tienen mayor riesgo de padecer cáncer de esófago.

En la mayoría de personas, el cáncer de esófago no es causado por una herencia de un gen defectuoso. Así que es poco probable que sus hijos desarrollen cáncer de esófago si usted lo tiene.