La quimioterapia usa medicamentos citotóxicos para destruir el cáncer. Estos fármacos no solo alteran la forma en la que las células cancerosas crecen y se dividen, sino que también pueden afectar a las células normales.

La quimioterapia se administra generalmente durante una sesión de tratamiento. Después de cada sesión por lo general tendrá un período de descanso de unas semanas, permitiendo que su cuerpo se recupere de los efectos secundarios.

El tratamiento y el período de descanso constituyen un ciclo de tratamiento. Su especialista será quien decida cuantos ciclos va a tener.

Por lo general el tratamiento de la LAM se divide en dos fases: fase de inducción y de post-remisión.