• Edad: Es considerado el factor pronóstico más importante, los pacientes jóvenes suelen tener mejor pronóstico, mientras que los mayores de 70 años tienen un pronóstico adverso.
  • Niveles de glóbulos blancos: Las personas con unos niveles menores de glóbulos blancos en el momento del diagnóstico tienden a tener un mejor pronóstico.
  • Translocaciones: Tienen un pronóstico adverso cuando: se han producido translocaciones en los cromosomas 4 y 11, la presencia de un cromosoma 8 adicional, la falta de un cromosoma 7 y la presencia del cromosoma Philadelphia.
  • Subtipo de la LAL: Normalmente las LAL de células T tienen mejor pronóstico mientras que las LAL de células B maduras tiene un pronóstico más desfavorable.
  • Infiltración del SNC: La infiltración del LAL en el SNC se asocia con un mayor riesgo de recaída.