• Como hemos comentado antes, la LLC cursa sin síntomas durante mucho tiempo, normalmente se diagnostica con una analítica de rutina y un aumento de los glóbulos blancos
  • Algunos pacientes presentan síntomas como: pérdida de apetito, fiebre o pérdida de peso.
  • Cansancio secundario a la anemia.
  • En la exploración física se observan adenopatías que pueden afectar a cualquiera zona ganglionar.
  • En fases más avanzadas, puede observarse un aumento del tamaño del bazo y del hígado.