La radioterapia utiliza rayos de alta energía para destruir las células cancerosas, mientras se hace el menor daño posible a las células normales. Se puede dar de manera externa o interna.

La radioterapia externa será dada en el departamento de radioterapia tal como le indique su médico mientras que la interna requiere la inserción de material radiactivo dentro del recto (cerca del tumor o dentro del mismo tumor) durante un corto periodo de tiempo.